"Una vida de récords mundiales"
Cuando Emilio Scotto tenía 9 años le dijo a su madre, “Mañana, voy a dar la vuelta al mundo.” Ella sonrió y respondió, “Mañana vas a la escuela, no a dar la vuelta al mundo.” Pero desde ese día Scotto mandó su mente errante por el planeta, con la certeza de que un día su sueño se haría realidad.
EMILIO SCOTTO
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En 1985, a los 30 años, Scotto renunció a su trabajo, subió a su motocicleta Honda Gold Wing 1100, y con sólo U$S 300 partió de Argentina. Scotto nunca se había ido antes a su país, pero él estaba seguro de que este movimiento aparentemente imprudente, lo transformaría en el hombre que quería ser. Scotto dio la vuelta al planeta no una, sino dos veces consecutivas, la primera en el sentido de las agujas del reloj y la segunda en sentido contrario, recorriendo la distancia de la tierra a la luna ida y vuelta, 735.000 kilómetros, visitando 279 países, islas y territorios de ultramar en los 6 continentes. |
MONICA PINO
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En el camino usó 13 pasaportes de 64 páginas cada uno, aprendió cinco idiomas y fue encarcelado seis veces. Fue arrestado bajo sospecha de tráfico de drogas en los Estados Unidos, de ser una espía ruso, de ser un espía de la CIA, y de ser un agente para el líder libio, el coronel Muhammad Gadafi. Se le acusó de entrar en Liberia con la intención de matar al presidente, se encontró con caníbales en Sierra Leona, y contrajo malaria que casi lo mata en las selvas del Congo
Cinco años más tarde, su novia Mónica Pino, se reunió con él en la India, y se casaron en una ceremonia hindú. Finalmente, el 2 de abril de 1995, regresó a su país después de 10 años, 2 meses y 19 días en la carretera, donde se le dio una merecida bienvenida de héroe.
En 2002 Emilio fue incluido en una lista internacional que nomina a los cuarenta exploradores más grandes de la humanidad, junto a Marco Polo, Cristóbal Colón, Hernán Cortez, Magallanes, Amelia Earhart, David Livingstone y Neil Armstrong